‘Batman Volumen 1: Yo Soy Gotham’, borrón y cuenta nueva

Pues ya los tenemos aquí. Hay que decir a favor de ECC Ediciones que no se han hecho de rogar demasiado y la jugada de sacar en tomos recopilatorios las primeras colecciones pertenecientes al Renacimiento más sonado de los últimos años. Un movimiento editorial que ha supuesto un paso de gigante para DC Comics que venía de Las Nuevas 52, con todos sus aciertos, fallos y polémicas. La jugada de Didio, aprendida la lección anterior, fue tan sencilla como efectiva: una vuelta a propuestas clásicas en todas las colecciones junto a una serie de artistas que realizarían un trabajo soberbio en cada una de las cabeceras. ¡Anda! ¿Así que lo único que había que hacer era contratar a gente competente para que hicieran los tebeos? Pues sí. La cosa, además, cobraba especial interés al ser muchas de estas nuevas series quincenales, lo que significaba buscar a más nombres que estuvieran dispuestos a aceptar el reto. Un baile de dibujantes y guionistas que, por increíble que parezca, no ha enervado a los aficionados ya que, tal y como hemos apuntado, todos rinden a un nivel espectacular.

Abrimos fuego, como no podía ser de otra manera, con este ‘Batman Volumen 1: Yo Soy Gotham’, el pistoletazo de salida del guionista Tom King con uno de los pesos pesados de la editorial. Tras el one shot Batman Rebirth 1(todas las colecciones tendrán su propio especial que servirá de transición entre The New 52 y este Renacimiento) firmado por Scott Snyder y Mikel Janín, nos metemos en faena por todo lo alto. Nunca mejor dicho ya que en las primeras páginas se nos presentan a dos metahumanos, Gotham y Gotham Girl, cuyos poderes, que recuerdan a los de Superman, ya han servido para luchar junto al Caballero Oscuro y salvarle de algún aprieto. Y no acabará ahí todo, puesto que tras la impactante primera escena del avión (ya me dirán, ya) vendrán otras en las que se enfrentarán todos juntos a ilustres villanos como Solomon Grundy, el Psicopirata o el Profesor Hugo Strange. Pero no se crean que todo va a ser un camino de rosas y “buen rollo” entre los protagonistas, habrá giros inesperados en los acontecimientos que propiciarán un cambio en el comportamiento de los recién llegados.

Si atendemos a la actualidad más reciente, la opinión y crítica generalizada de esta etapa (boda incluida y demás) no puede ser más unánime al tachar al Batman de Tom King como una de las mejores series que ha dado el Noveno Arte en los últimos años. Sin embargo, muchos fueron los que no terminaron de “calar” el estilo de King en estas primeras entregas: demasiadas elipsis, una narrativa que confundía a la mayoría de los lectores, un ritmo narrativo que se veía lastrado por el uso desmesurado de nubes de pensamiento o redundar sobre acontecimientos que han tenido lugar en la historia (primero somos testigos directos y después Batman lo explicará con palabras). Servidor no encuentra dichos fallos por más que los busque aunque hay que admitir que, esas críticas al trabajo de King, han sido mencionadas en más de un medio. Sí estaría dispuesto a admitir que el estilo que usa el ex de la CIA puede llegar a desorientar a alguno, pero no mucho más que otros guionistas menos hábiles. A todo esto hay que añadir el espectacular trabajo que David Finch realiza en cada una de las páginas que firma, más comedido que de costumbre pero igualmente sorprendente. Incluso tendrá la ayuda de un Ivan Reis (¿recuerdan lo que dije un poco más arriba sobre los artistas implicados en este Rebirth?) que siempre suma al resultado final por muy puntual que sea su colaboración. Un punto de inicio bastante interesante que seguirá mejorando a medida que avance la serie, llegando a alcanzar cotas muy altas por mucho que algunos alcen sus voces.
[Grade — 8.50]