El doctor Kirihito Osanai viaja a la remota aldea de Inugamisawa, situada en la isla de Shikoku, para investigar el origen de la enfermedad de Monmo, que provoca una inquietante transformación en quienes la padecen. Partiendo de esta premisa, Osamu Tezuka explora una vez más los rincones más insondables de la naturaleza humana.