No era una historia imaginaria. No era un relato ambientado en una dimensión alternativa. En 1996, después de varias décadas, Lois Lane y Clark Kent se dieron el “sí, quiero” en un evento que marcó un antes y un después en la historia del Hombre de Acero. Pero por muy emotivo que resulte el enlace, a los recién casados les aguarda una luna de miel bastante movida...