Cómic Europeo: Reseña de "El Fantasma de Gaudí" de El Torres y Jesús Alonso Iglesias [Dibbuks].

El Fantasma de Gaudí
Hoy tenemos el placer de traeros una novela gráfica en clave de thriller que ha sido laureada en diversos medios y que a lo largo del año pasado marcó un gran revuelo en el mundo del cómic nacional.

Hablamos de El Fantasma de Gaudí, con arte de Jesús Alonso Iglesias y guionizada por el aclamado guionista El Torres, quién gracias a la misma se alzo con el premio a Mejor Obra de Autor Español en el Salón del Cómic de Barcelona de 2016 y con el premio a Mejor Guionista Nacional en Expocómic 2015, entre otros.

Los responsables de la publicación El Fantasma de Gaudí fue la editorial Dibbuks, quienes lanzaron simultáneamente la obra tanto en castellano como en catalán (Els Fantasmes de Gaudí) en un cartoné de 19,5 x 27,5 centímetros en cuyo interior hayamos un total de 124 páginas a todo color, entre las que encontramos acompañando a la historia toda una serie de extras que se nos antojan bastante indispensables para valorar la obra, así como un prefacio realizado por el periodista Javier Sierra.

Como detalle cabe citar que la editorial publicó las ediciones castellana y catalana con dos portadas diferentes; un detalle bastante curioso que le da aun más valor al coleccionista.

El Fantasma de GaudíEl Fantasma de Gaudí

El Fantasma de Gaudí
Los asesinatos del Trencadís.
Nuestra historia da inicio con Toñi, una mujer joven que trabaja como cajera en un supermercado de la Eixample de Barcelona. Un día al salir de su trabajo, presencia como un señor de edad avanzada con un pasmoso parecido con Antonio Gaudí camina por la carretera a punto de ser atropellado por un vehículo. La escena hace reaccionar a nuestra protagonista, que sin dudarlo salta en su ayuda salvándole la vida.

Para su sorpresa, tras el incidente, el anciano desaparece sin dejar pruebas de su existencia, y todos los presentes aseguran que Toñi había saltado al vacío sin ningún motivo.

Poco después, Jaime Calvo asiste en calidad de detective a la Casa Vicens con un motivo bastante siniestro: la aparición de un cadáver horriblemente mutilado en medio del monumento sin que nadie le haya visto entrar.

El Fantasma de Gaudí

El Fantasma de Gaudí
Este primer asesinato da pie a una matanza en serie que tiene como escenario los principales monumentos construidos por el famoso arquitecto, pasando por la Casa Batlló o el Parque Güell mientras a su paso deja un intrigante sendero de confusión y confabulación.

En este punto todo nuestro interés se pone en el detective Jaime Calvo, quién se convierte en el uraño héroe de esta historia; un tipo claro, directo y con un algoritmo de pensamiento en el que la lógica se impera que, hasta la fecha, no se ha ganado demasiadas amistades entre las autoridades.

Bajo el telón de su investigación veremos como las extrañas apariciones de un arquitecto que debería llevar mucho muerto comienzan a arrojar una sensación de historia de fantasmas, mientras tras él se desata toda una conspiración que parece tener sus obras arquitectónicas como objetivo.

El Fantasma de Gaudí

El Fantasma de Gaudí
Bajo esta premisa se nos presenta una trama que combina magistralmente la clásica historia policíaca con un ritmo bastante trepidante que nos permite imaginarlo rápidamente adaptado a la gran pantalla.

Pero sea como fuere, la perfecta historia y narrativa que aporta El Torres se ve complementado por el arte de Jesús Alonso Iglesias, quién aunque a priori nos deja un poco descolocados con un dibujo que se nos antoja infantil para lo expuesto en estas páginas, pronto lo identificamos rápidamente con la sangre y las vísceras que vemos aparecer en sus viñetas al más puro estilo Seven.

Pero no podemos terminar de hablar de esta obra sin alabar el enorme trabajo de documentación en la obra del arquitecto catalán, el cual nutre cada viñeta, cada fondo y cada diálogo del más puro espíritu de al ciudad condal, hasta el punto en que, tal y como vemos en la página a la derecha, las propias viñetas presentan sus clásicas formas onduladas.

Y es que al final, los detalles son los que hacen realmente grandes a las obras.

El Fantasma de Gaudí