Sabemos que durante el reinicio de los Nuevos 52, Dc pretendía una reinterpretación de todos sus personajes y adaptarlos a los tiempos actuales. Algunos con mucho éxito, como Batman de Scott Snyder y Greg Capullo y otros con un reinicio y sagas desastrosas como puede ser todo lo relacionado a Superman.
Green Arrow no se iba a librar de este reinicio, pero por desgracia, la introducción de un joven Oliver Queen inexperto e impulsivo no fue del agrado de los fans. Pasaba el tiempo y el balance de buenas series y malas se inclinaba más hacia la del desastre. Dc decidió por lo tanto un cambio de equipos creativos en la mayoría de las series para intentar hacerlas reflotar. Pretendían concluir arcos argumentales y empezar nuevas historias con nuevas ideas. Es aquí donde entra en juego el salvador (en mi opinión) de Green Arrow durante los Nuevos 52, Jeff Lemire.
Hoy en día solemos escuchar muchas maravillas sobre Jeff Lemire, ya que es un autor que sin duda posee un gran talento y no hace nada más que evolucionar como guionista.
Jeff Lemire, pretende hacer que el personaje de Oliver evolucione durante su etapa y además nos introduce elementos muy interesantes.
En el argumento nos introduce una serie de elementos de misticismo que estará relacionado directamente con nuestro protagonismo y será clave para el desarrollo de la historia. Jeff Lemire decidió introducir elementos místicos a la trama ya que (como he mencionado) quería revitalizar al personaje e incluir nuevos ingredientes en el mito del arquero esmeralda.
A pesar de que Lemire intenta “reiniciar la serie” o más bien, los arcos argumentales, es cierto que no se olvida de todo lo establecido por los distintos autores en números anteriores. Hablamos de drama familiar, que al incluirlo en esta historia de misticismo, todo converge de una forma muy natural.
Es cierto que Lemire se toma su tiempo para contar su historia, menciono esto ya que este autor le gusta profundizar mucho en sus tramas y nos empieza a introducir elementos que realmente, en el final, no llegan a tener mucha importancia y al lector medio puede que no le interese este tema y le pueda llegar a saturar.
Esta serie es fácilmente recomendable para cualquier fan del personaje, o cualquier lector que conozca más o menos el origen del arquero.
En cuanto al apartado gráfico tenemos a Andrea Sorrentino, que es sencillamente Brutal. Sorrentino nos trae unas composiciones de páginas muy interesantes y un dibujo muy limpio y atractivo que junto al color que se le atribuye tenemos una de las mejores ilustraciones de toda la etapa de los Nuevos 52.
En resumen, Green Arrow de Jeff Lemire es una serie llena de acción y misterio que ningún fan del arquero esmeralda se debería de perder.