Reseña de El dios vagabundo

El artista completo Fabrizio Dori, nos narra la odisea de Eustis, un sátiro discípulo del Dios Dionisio, el cual fue maldecido por Artemisa, hija de Zeus, hermana de Apolo. Esto, puede sonar en demasía a mitología antigua, a relatos ya olvidados, y en parte es así, pero la historia de Eustis trasciende más allá de las grandes gestas, la historia de Eustis transcurre a finales del siglo XIX, alzando la bandera de la libertad y reverenciando a grandes artistas.

Tras ser expulsado de la corte de Dionisio, Eustis, vaga entre mortales, vive en la indigencia sacando provecho de sus dotes adivinatorias a cambio de un buen vino. Un día, tras muchos siglos de espera, la oportunidad de redimirse ante Artemisia aparecerá inesperadamente, y con la ayuda de un viejo profesor repleto de sueños empezará su viaje hacia lo desconocido. Al poco tiempo, se les unirá en el camino Leandros, un héroe errante que no pudo cumplir con su destino. Este es el inicio de toda una aventura, en la que un curioso grupo avanzará en su historia para afrontar miedos e ilusiones, como solo un niño puede hacerlo, despojándose de prejuicios y con mirada desafiante.

Fabrizio Dori envuelve al lector en un aura de paz y tranquilidad mientras avanza en su historia, la belleza de sus palabras se equipara a la de sus dibujos, y consigue envolvernos en un aura de felicidad. La felicidad en un libro se puede conseguir de muchas maneras, con un encuentro entre protagonistas, tras un final épico, en la culminación de un amor o de muchas otras formas, pero conseguir esa felicidad simplemente por el hecho de estar leyendo una historia es arduamente difícil, Fabrizio lo consigue. Fabrizio nos da misticismo, nos hace reir con comentarios en apariencia simples pero acertados, nos transporta a mundos perdidos y olvidados, mundos de colores o con oscuridad infinita, Fabrizio hace magia con su dibujo, nos da lecciones de arte, juega con la historia y se divierte, Fabrizio regala amor y te atrapa en su mundo, para que cuando cierres este libro, seas capaz de sentir lo que siente un sátiro en sus sueños, vino, fiesta y hierba fresca creciendo bajo sus pies, Fabrizio es un sueño.

Que bien poder descubrir nuevos autores a los que seguir, que bien poder gozar de sus obras, poder enriquecerme de ellos y de su mirada. Obviando premios y laureles, realmente parece increíble que el resonar de obras como El Dios Vagabundo no sea mayor, y es que a veces, los aficionados al cómic olvidamos indagar, arriesgarnos, bucear en lo desconocido, prefiriendo acurrucarnos entre mantas y pijamas de sobra conocidos.

El Dios Vagabundo de Fabrizio Dori es el viaje del héroe que siempre quisiste leer, una lectura tan reconfortante y feliz que difícilmente borrarás de tu mente.