Javier Olivares y Santiago García nos presentan una nueva visión de la Ilíada de Homero. Los autores, profundizan en la importancia del sacrificio de Aquiles, en su dualidad, y en cómo la leyenda del guerrero mitológico más importante de toda Grecia se ve reflejada en nuestro día a día.
En la contraportada reza: “De tu cólera nacerá Europa, pero para que nazca Europa, tú tienes que morir en Troya”.
La sorpresa nos la encontramos nada más iniciar el tomo, con un seguido de páginas mudas, páginas de una gran importancia para que podamos absorber rápidamente la atmósfera que tan minuciosamente han preparado los autores. Saboreáremos la arena de la playa de Troya, la soledad y rectitud del soldado que lleva diez años librando una guerra que parece no tener fin. La moral hace mella, pero la vergüenza de una posible retirada y el deshonor que eso supondría, transforma sus dudas en resistencia, bajo unas condiciones infrahumanas, con la esperanza de que algún día, Héctor, el gran príncipe Troyano encargado de las defensas de la ciudad, abra sus puertas y ponga fina a una guerra que largo tiempo ha durado. Una guerra que la mayoría de ellos no quería, pero que libran con valor al lado del jefe de la coalición Griega, Agamenón.
Es realmente sorprendente y gratificante, leer y releer este relato, un relato que nos muestra que por muy difícil que parezca, todavía hay vertientes nuevas que explorar en la Ilíada de Homero. Un relato que nos devolverá a nuestro imaginario míticos guerreros Griegos como Ajax, reflejado en estas páginas como un simple fortachón bobalicón, o Ulises, que va incrementando su papel poco a poco hasta guiarnos hacia su Odisea, pero todos y cada uno de ellos, eclipsados por el gran Aquiles, el más hermoso y poderoso de los todos los guerreros.
El amor siempre tan influyente en nuestras vidas será la causa de la cólera de Aquiles, la separación forzada de Briseida dará paso a un momento mágico, obrado con gran maestría por los autores, utilizando recursos del cómic y ofreciéndonos todo su saber, para transportarnos y ofrecernos una reflexión muy trabajada. Es fantástico y maravilloso, ver como el poderoso Aquiles sale de este momento dispuesto a ser dueño de su destino, y como este ya había sido tejido.
Javier Olivares al dibujo nos regala todo un espectáculo digno de mi más sincera alabanza, un dibujo característico lleno de intención y acción, tumultuoso cuando tiene que serlo, reflexivo en ocasiones, lleno de esencia Griega, esa esencia que hemos visto en más de una ocasión observando sus monumentos, filósofos, guerreros o hasta sus característicos jarrones decorados con dibujos que nos narran su historia. Un dibujo que va acompañado por las palabras de Santiago García, quien nos guiará hasta el final, donde todo converge, descubriéndonos que la gloria se vive en vida y que la piedad, se la labra uno mismo.
El cómic es arte, no es una reclamación, es un hecho, y al que diga que no, que le llueva mí cólera en su diminuta cabeza.